«Quizás no sea malo pero… ¿habré elegido bien? ¿Será este el mejor abogado penalista para mi caso o, por contra, pagaré las consecuencias por haber elegido mal?»

¿Estás de los nervios porque te acusan de un delito y te han venido estas ideas a la mente? Está claro que elegir al mejor abogado penalista para tu caso no es nada fácil.

Si este es tu caso, sigue leyendo. Te voy a contar 4 secretos que te ayudarán a descubrir si estabas en lo cierto y has elegido al mejor abogado penalista o debes pensar en elegir a otro que, este sí de verdad, sea el mejor abogado penalista para ti y tu caso.

• Secreto nº 1… Preguntando se llega a Roma.

Está claro que todos buscamos al mejor abogado penalista cuando nos acusan de un delito pero, cuando nos sentamos delante de él o ella, nos da apuro preguntar cosas tan básicas como ¿Eres caro o barato? ¿Cuánto me vas a cobrar? ¿Cómo me vas a defender si te elijo? ¿Realmente, en mis circunstancias, eres el mejor abogado penalista o hay otros que podrían ayudarme mejor que tú?

En la odisea que supone la búsqueda del mejor abogado penalista, en una situación tan delicada como la tuya, normalmente solemos pensar algo parecido a esto… «He escuchado que los abogados sois caros y, pasa el tiempo, y hay que estar detrás de vosotros porque no informáis de nada… ¿De qué tipo eres tú?» o «¿Me vas a hablar como habláis los abogados (en chino para el resto de los mortales) o me vas a explicar todo lo que pase, paso a paso, de una forma en la que te pueda entender perfectamente?» Seguramente algunas de estas cosas habrán pasado por tu mente pero, quizás, te dé apuro decírselo.

Si te fijas, tienes toda la esperanza de que, realmente, sea el mejor abogado penalista para ti pero, sin embargo, no te atreves a preguntar cuestiones que, para ti, son básicas…

Déjate de apuros. En tu caso te estás jugando mucho y, sin embargo, te da cosa preguntar este tipo de cuestiones porque te resulta incómodo al que esperas que sea, para ti, el mejor abogado penalista. Te diré una cosa… Si lo haces y preguntas todo lo que necesites hasta que todo te quede claro, descubrirás dos cosas… O que el abogado no era como tú pensabas (y podrás descartarlo rápido) o que acabes teniendo la corazonada que este abogado realmente sea el mejor abogado penalista con el que te puedas encontrar.

De hecho, te diré más… Todas estas preguntas deberían quedar claras casi sin que tú hablases. Ten en cuenta que el abogado debería ponerse en tu pellejo desde el primero momento y tratar de sentir lo que tú sientes para entenderte mejor y poder ayudarte conforme a tus inquietudes y circunstancias. Si no lo hace, quizá no sea el mejor abogado penalista para ti pero, por si acaso, porque te quede claro del todo, pregúntale. No vas a perder nada.

Cuando, por ejemplo, alguien se sienta con nosotros con un problema como el tuyo, procuramos darle todas estas respuestas antes de que incluso nos las pregunte. Sin embargo, puede que se nos quede alguna en el tintero. Honestamente te digo que nos encanta que nos hagan preguntas que a priori tú puedas pensar que son algo incómodas o difíciles para nosotros.

¿Porqué? Porque tenemos claro que para ser el mejor abogado penalista para ti, debemos cruzar esa barrera de la desconfianza lo más pronto posible, si es posible en esta primera reunión y que tenemos que ser honestos y hablar claro. Mientras antes pase, antes podremos conocernos y antes podremos darte las respuestas que mejor se adaptan a tus necesidades. Así que hazme caso… Pregunta!

Pregunta todo lo que necesites hasta que no te queden dudas y deja de preguntar solamente en el momento en el que la respuesta que te han dado es la que esperabas, o tristemente la contraria. Como te decía al principio, preguntando se llega a Roma.

• Secreto nº 2 ¿Irías con él al fin del mundo? 

Como antes te decía, es importante, fundamental para ti, que sientas que estás en buenas manos. Quizá sea un poco exagerado decirte que te vayas con tu Abogado al fin del mundo pero sí que deberías sentir toda la confianza de ser claro o clara, de poder decir lo que piensas y lo que sientes.

Además de preguntarle todo lo que necesites al que esperas que sea el mejor abogado penalista del mundo, deberías investigar sobre su trabajo, sobre sus publicaciones o su perfil profesional, sobre las valoraciones del despacho que encuentres en las redes sociales, o en Google por ser más concretos, o en cualquier otro sitio de internet.

Honestamente te digo que cuando voy a comprar un cargador para el móvil, por ejemplo, en una tienda de Internet como la que estás pensando, yo al menos lo primero que hago es meterme en las valoraciones y, si veo que son negativas, me voy a otro! incluso en cosas tan poco importantes como esta, yo busco lo mejor y la mejor relación calidad-precio.

En tu caso estás hablando de cosas infinitamente más importantes que un cargador de un teléfono móvil… Estás hablando de tu futuro y del de tu familia… Por eso debes saber si realmente estás ante el mejor abogado penalista o estás ante un abogado del montón y, para aclararlo, ¿Qué mejor manera que preguntárselo a otros sabiendo lo que opinan una vez que ya han trabajado con el abogado?

Yo no sé si somos las mejores, o no (más bien te diría que nadie es perfecto y tampoco lo somos nosotros), pero aquí te dejo un enlace a lo que opinan nuestros clientes, por ejemplo, de nuestro despacho de Sevilla y aquí te dejo otro enlace de lo que opinan los de nuestro despacho de Madrid y aquí los de Málaga. Una vez que veas las opiniones de las demás personas que ya han pasado por sus manos quizás estés más cerca de preguntarte y responder con más certeza si irías al fin del mundo con tu abogado.

Te pongo a continuación una captura de pantalla con, por ejemplo, las valoraciones en google de nuestro despacho de Sevilla en el momento en el que te escribo este artículo sobre el mejor abogado penalista para tu caso.

La relación entre el abogado y el cliente tiene que ser de una absoluta confianza ya que estás poniendo en manos de otra persona que, quizás, antes no conocieras de nada, tus propios intereses. Si es digno de tu confianza, confía en su trabajo. Si no lo es, vete a otro abogado! Recuerda que no buscas un buen abogado, buscas al mejor abogado penalista 😉

• Secreto nº 3. Que se gane tu confianza! 

¿Cómo era ese dicho…? Creo que era algo así como “más vale una colorada que ciento amarilla…” (mi mujer siempre me dice que nunca acierto con los refranes…Perdona si es este el caso!).

Es muy importante dejar claro desde el principio cuando os reuniréis y cómo os comunicaréis cuando haya novedades, aunque no sean las más importantes (yo querría saberlo todo sobre mi caso). También es muy importante dejar claro cómo y cuándo os comunicaréis incluso en los tiempos en los que no hay novedades ya que es lógico que te genere bastante ansiedad el hecho de que pasen los meses y no tengas noticias del abogado. Esta es una de las claves para saber cómo elegir un abogado.

• ¿Realmente se lo está currando o pasa de mi? 

Es más que posible que llames al abogado y no te coja el teléfono. A todos los abogados nos pasa. Es posible que le escribas un mensaje y no te responda el mismo día. En mi caso, cuando me reúno contigo o con cualquier persona que necesita de nuestra ayuda me dedico en cuerpo y mente solamente a esa persona.

Es muy normal que muchos días de la semana también tenga juicios y en esos momentos tampoco puedo coger el teléfono. Pese a esto, procuro devolver mis llamadas a lo largo del día. Si en tu caso llamas al abogado y no te lo coge te recomiendo que te plantees…”Aunque lo he llamado y no me lo coge… ¿Normalmente me devuelve las llamadas y los mensajes en un plazo corto de tiempo?”. Si es el caso, no debe haber problema. Si no lo es, debes sentarte y dejar claro con él cuándo y cómo te dará respuesta a tus contactos, como regla general.

Si necesitas más información también puedes ver otro artículo que, espero, que te resulte muy interesante sobre qué debes tener en cuenta para contratar a un abogado (Haz clic aquí).

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